Palabras, quizá razonamientos, litófagas...

Tan duro como saber que ella puede perforar la piedra y yo no.
Tan duro como perderse en las palabras como el mimo en sus gestos nihilistas.
Tan duro como compartir una tarde con mi loro misántropo.
Tan duro como ser profesional de tu propia mojiganga.
Tan duro como esperar y que nunca llegue.
Tan duro como cuando llega y ya no lo quieres.
Tan duro como el esfuerzo empleado para un resultado no querido.
Tan duro como que ya no te gusto, ya no me gustas, no me has enamorado, no te he enamorado...

Cuando sepa que no volverás a estar dentro de mí...

Me voy al zoo.



Godot no vendrá hoy, pero mañana seguro que sí...